Pero el perfecto mundo de Jesse se rompe en mil pedazos cuando Ava sufre un terrible accidente que la deja en coma.
Desesperado y enfadado, siente que la vida se le escapa de las manos, no puede sobrevivir sin el amor de su mujer. Cuando Ava empieza a recuperarse cree que por fin todo volverá a ser como antes, pero la pesadilla no ha hecho más que empezar. Ava no puede recordar nada de los últimos dieciséis años de su vida, todo el tiempo que han pasado juntos, así que ahora es un extraño para ella. Jesse deberá hacer todo lo que esté en sus manos para que ella recupere su memoria y conseguir que se enamore perdidamente de él de nuevo.
Si estás destinada a una persona, no importa cuántas trabas te ponga el destino porque volverás a ella.
Opinión:
Después de leer la trilogía Mi hombre con la que me saco algo
más de un suspiro de amor, pues es una historia muy intensa yo diría incluso
que demasiado por la forma en que te atrapa, no he podido resistirme a leer
esta cuarta entrega, y con esa forma que tiene Jesse Ward de conseguir lo que
quiere, volvió a embriagarme de su cuerpo, de su testarudez, de su dulzura y de
su locura por su obsesión por el control, porque aunque hayan pasado los años y
sea un cincuentón madurito su carácter es el mismo aunque encontramos a una Ava
que a domesticado en parte a la fiera y en el trascurso del libro podremos ver
a Sr Ward bastante dócil, bueno realmente porque no le queda de otra si quiere
recuperar a su mujer y es ahí donde realmente vamos a ver su lado más
vulnerable, un hombre paciente, aunque por dentro se le lleven los diablos, a
un hombre enamorado capaz de realizar cualquier cosa por recuperar a su Ava. Es
una muestra de amor en toda regla lo que hace este hombre porque su mujer
recupere sus recuerdos y también veremos a una Ava que hace con ese hombre lo
que quiere y que poco a poco vuelve a enamorase del amor de su vida.
Solo puedo decir que me ha encantado como en las anteriores
entregas, es mucho más tierna con menos escenas de sexo a lo que nos tenían acostumbrados,
y por el paseo que da en las escenas para que Ava recuerde, te hace a ti
recordad como fueron sus comienzos. ¿La recomendaría? SI por supuesto, leer a
Jesse Ward es una lectura obligatoria para toda amante de la literatura erótica.
